Constantina celebraba el pasado mes de noviembre la XVIII Jornadas Micológicas de Constantina Parque Natural Sierra Norte de Sevilla, organizada por la Sociedad Micológica “Sierra Norte de Sevilla”. Hablamos con Juan Manuel Pérez del Villar, socio fundador, quien nos cuenta la gran aceptación que tiene año tras año estas Jornadas.
En primer lugar es pregunta obligada, ¿cómo, cuándo y por qué nace la Sociedad Micológica Sierra Norte?
Nace de una manera casual, por un lado un grupo de amigos que nos comenzamos a interesar por la micología y por otro, personas aficionadas de manera individual y que nos unimos justamente alrededor de las I Jornadas Micológicas allá por 1996
Con cuantos socios contáis a día de hoy
Somos 12 socios.
Juan Manuel, qué tengo que hacer para asociarme a la Sociedad Micológica “Sierra Norte de Sevilla”
Básicamente darte a conocer, salir al campo, compartir especímenes y aprender juntos.
Qué ventajas tendría como socio
Justamente eso, aumentar el conocimiento de cada uno sobre el reino fungi, aunque funcionamos de una forma bastante informal, ya que nos conocemos todos, salimos al campo a golpe de teléfono, nos vemos en casa de alguno para identificar especímenes…
Las Jornadas Micológicas han alcanzado este año su mayoría de edad. ¿Cómo surge la idea de comenzar a celebrarlas?
Prácticamente surge de manera espontánea, como te comentaba antes las I Jornadas se organizaron como una toma de contacto con la variedad de setas que existen en la zona, a partir de entonces y respaldados por el éxito de público ya nos organizamos como asociación y decidimos plantearnos unas Jornadas Micológicas anuales.
¿Desde el principio tuvo tanta aceptación como tiene ahora?
Si, las I Jornadas se hicieron casi sobre la marcha y tuvo un ámbito prácticamente local pero a partir de las II Jornadas ya tuvimos una mayoría de participantes de fuera.
Os habéis planteado ampliarla.
Hemos hecho un camino de ida y vuelta, al principio de mayor simplicidad hasta alcanzar una organización más compleja y una vuelta a lo esencial
Al poco tiempo de iniciar las hacíamos unos montajes bastante complejos,organizábamos una degustación de caldereta al volver del campo, actividades de senderismo o visitas guiadas por el pueblo para la tarde del sábado, buscábamos, transportábamos y montábamos nosotros las mesas con tablones, las sillas de las conferencias, la instalación de imagen y sonido... todo de manera voluntaria, participaba “un montón” de gente del pueblo de forma altruista, pero significaba un trabajo ingente que teníamos que compatibilizar con el trabajo, la familia…
Pero poco a poco los socios nos fuimos dispersando por temas laborales y al quedar en el pueblo menos personas para organizar las Jornadas las hemos simplificado a lo esencial, es de destacar el gran apoyo que recibimos por parte del ayuntamiento de Constantina.
Hemos de reconocer que aún hoy en día sentimos el respaldo de particulares y empresas del pueblo y en cuanto pedimos ayuda se vuelcan con nosotros.
Una de las actividades que más éxito tiene es la salida guiada al campo. Desde la Asociación hay programadas actividades similares paralelas a las de las Jornadas.
No, la única actividad que organizamos abierta al público general son las Jornadas Micológicas que suelen realizarse sobre el tercer fin de semana de noviembre, nosotros salimos dos o tres veces al año de manera más formal, en primavera, a principios de otoño y en invierno.
Muchas gracias por tu tiempo y antes de finalizar Juan Manuel, ¿algo más que añadir?
Ú]nicamente resaltar la importancia de conocer de una manera real este “mundillo” sobre todo si el interés principal es el culinario, el consumir setas, ya que hay bastantes tóxicas y algunas mortales, con el riesgo siempre posible de confundir una especie con otra, y entendemos que dada la variabilidad que puedes encontrar en la naturaleza de una misma especie debido a cambios producidos por la lluvia, humedad,… la mejor manera, si no la única, es introducirse en este campo del conocimiento es acompañado de un experto y una buena guía, salir al campo y tiempo de dedicación.
Ojo con lo que comes “todas las setas se comen, algunas una sola vez”
